Fuente parisina.

Otro lugar unido a mi infancia y a la adolescencia, es la plaza de Colón. En ella hay una fuente con mucha historia, ella llegó a Linares como antes llegábamos los niños: de París. 

Un recuerdo del pasado francés de esta ciudad, durante los siglos XIX y XX, Aquí existió una importante colonia francesa, que llegó a contar incluso con un consulado, al igual que la colonia inglesa, alemana y belga. 

Todos ellos dejaron huella de su presencia en esta ciudad. 

Cuantas veces he jugado de pequeño alrededor de ella, corriendo palomas y tórtolas. Ellas se acercaban a refrescarse del calor veraniego de esta tierra andaluza, y nosotros, que aún no levantamos  "un palmo" del suelo, corríamos para que levantaran el vuelo, mientras  nuestras madres nos observaban desde un banco a la sombra de los árboles de este jardín. 

Ha sido cómplice del primer amor, así como del primer beso. Amor de juventud, inocente y puro. Cogidas de manos y abrazos. De horas hablando con cariño a la mujer amada. sentado en un banco, a su lado.

Con los años, ella a visto, que yo me he quedado sentado. Contemplado a mis hijos pequeños, correr detrás de las palomas y jugar a su alrededor. Claro esta, acompañado de mi amor de juventud, el único. Cogidos de la mano y hablando con cariño, al frescor de la fuente.